El pasado 11 de marzo, el mundo dio un respingo. El todopoderoso Japón, el país de la eficiencia y la eficacia, se tambaleaba bajo el implacable azote de un terremoto. La tierra y el mar empezaron a escribir un guión digno de una película de grandes castástrofes, de esas que tanto tirón tienen en taquilla. No faltaba en el combinado, siquiera, la amenaza nuclear que aún es capaz de ponernos, a todos, los pelos de punta. La tragedia pronto fue sustituida por otros asuntos en la agenda de la mayoría de nosotros. Pero hay quien no olvida. Ayer, un puñado de personas acudieron al restaurante Culler de Pau, en San Vicente do Grove, para participar en un acto de solidaridad con el pueblo nipón.
Un pueblo que, en medio de la catástrofe, nos descubrió su grandeza y volvió a sorprendernos con la fortaleza de sus convicciones, con la contención de sus gestos y con la exquisitez de sus modales hasta en los momentos de más desesperación. Para homenajear a esos hombres y mujeres, una organización voluntaria internacional, Japanese Cabinet Decretariat?s Disaster Volunteer Coordinatio Office, ha puesto en marcha una campaña que consiste en mostrar afecto y reverencia a los damnificados por el terremoto de una forma bien sencilla: haciéndose una foto con un cartel alusivo a la cuestión y subirla a Internet.
Esa esa la campaña que ayer llegó hasta O Grove, gracias a la iniciativa de Itsuko Hori, una japonesa residente en Santiago, y Lanzada Calatayud, una amante de la cultura nipona. El acto desarrollado en el restaurante de San Vicente fue, según destacan sus organizadores, «una cosa sencilla». Además de hacerse las fotos, sonó música japonesa gracias a la intervención de Mine Kawakami (al piano) y Tadashi Yamamoto (sanshin). La primera es una mujer que vive entre Madrid y Kyoto, y que da conciertos por todo el mundo. El segundo, un profesor de la Universidad de Tenri, en Japón, que durante muchos años coordinó cursos sobre la cultura gallega.
La elección del restaurante Culler de Pau para acoger esta velada no es casual. Podría responder, en primer lugar, a la calidad de este local, inscrito en el «Grupo Nove» de la cocina gallega más innovadora. En el caso del restaurante meco, los sabores tradicionales de nuestra gastronomía se funden, a veces de manera insospechada, con la herencia cultural del lejano Japón. Y es que en las cocinas de este restaurante trabaja desde hace años Takahide Tanaka. Su nombre no deja lugar a dudas. Tras él está siempre la figura de Javier Olleros, el responsable del restaurante, quien siempre ha sentido una gran atracción por la cultura nipona. Teniendo en cuenta todo esto, no es de extrañar que alrededor de medio centenar de personas se diesen cita ayer en este establecimiento para rendir homenaje al Japón y a quienes dan vida a ese gran país.
Manquiña, en O Grove
Seguimos en O Grove. Nos vamos, en concreto, hasta sala Mohai, que este verano ha sido escenario de varias actuaciones de humoristas. La próxima cita que está en cartel es la de una cara bien conocida en Galicia: la de Manuel Manquiña. La cita con él es este domingo, y las entradas ya están a la venta (10 euros venta anticipada, 12 en taquilla).
En Grove nos quedamos, en el pub O Imperfecto. Allí actuará mañana Telephones Rouges y Metralletas Lecheras, dando forma a un concierto en el que la fiesta está garantizada. La cita es a medianoche, y la entrada costará cuatro euros.