La Xunta entierra el conflicto de la PO-531 tras dos años de protestas

A. Castroverde PONTEVEDRA/LA VOZ.

AROUSA

Cores Tourís presenta en una asamblea el proyecto del tramo entre la ITV y el nudo pequeño de Curro

11 jun 2010 . Actualizado a las 02:00 h.

Dos años de protestas en la carretera quedaron anoche atrás al aceptar los vecinos el proyecto definitivo de la PO-531 en lo que atañe al tramo entre la ITV y el nudo pequeño de Curro. El entierro oficial del conflicto fue oficiado por el propio delegado territorial de la Xunta, José Manuel Cores, quien fue invitado a una asamblea vecinal para presentar el nuevo proyecto del vial que une Pontevedra y Vilagarcía a la que, según fuentes autonómicas, asistieron una cien personas.

Atrás quedan las cruces clavada sen los arcenes en señal de luto por la reforma, las marchas de los vecinos por los pasos de cebra a la hora de la salida del trabajo para bloquear el tráfico, las invitaciones a rosca a los conductores afectados por los atascos o las manifestaciones ante los mítines de Touriño. Los afectados se declararon ayer en Curro satisfechos por el proyecto, según señaló el portavoz de la plataforma de la PO-531, Manuel Corredoira, si bien preguntaron sobre las distancias de edificación y plantearon alguna sugerencia más.

Destaca la petición de que se conecte en la nueva rotonda de Áspera una pista que empata a su vez con la carretera que da servicio a San Amaro y A Portela, a fin de que estas dos localidades tengan un adecuado acceso a la PO-531.

Aunque la mejora del proyecto comenzó a fraguarse con la ex delegada de Política Territorial, Isabel Domínguez, el delegado de la Xunta reclamó ayer el mérito del acuerdo al subrayar que el nuevo Gobierno de Feijoo «logrou desbloquear este proxecto nun só ano». Cores señaló que el pacto fue posible «grazas ao diálogo cos veciños tanto de Curro como de Campañó, parroquias afectadas polo paso da PO-531». «Levamos moitos meses a traballar -dijo- para ir resolvendo os problemas que xurdían en torno a redacción deste proxecto de reforma retocando detalles cos veciños ata ter un borrador consensuado que convence a tódalas partes».

Según explicó en presencia del alcalde de Barro, José Anronio Landín, en los tramos con bajo nivel de población habrá un tercer carril lento en sentido hacia Vilagarcía. En los más poblados habrá un carril a cada lado con aceras y una mediana para peatones. También se instalarán aparcamientos y paradas de autobús donde sea factible.

«O obxectivo é garantir non só a seguridade viaria senón tamén a dos peóns, e por iso instalaremos os pasos de peóns que sexan necesarios e que se concretarán no proxecto definitivo», añadió Cores Tourís.