Unas instalaciones inadecuadas y un presupuesto insuficiente

La Voz

AROUSA

06 sep 2008 . Actualizado a las 02:00 h.

El edificio de Zamar en el que se instala Chavea fue construido en la primera mitad de los años sesenta y se encuentra bastante deteriorado. El informe del Valedor indica, además, que las instalaciones y el mobiliario son insuficientes y que no tiene calefacción ni zonas de recreo ni deportivas en el exterior, de manera que los usuarios utilizan el campo de fútbol de Rubiáns. Por eso, pese a que cumple la normativa de seguridad, no reúne las condiciones idóneas para un centro de estas características.

El Valedor también considera que la asignación presupuestaria es insuficiente para atender sus necesidades. La dirección del centro considera que la cantidad mínima para cada plaza debería situarse en 120 euros por día, una cuantía a la que Chavea no llega.

Todas estas razones hacen que el informe concluya que «no momento actual, o centro non está dotado das instalacións adecuadas para ofrecer unha atención de calidade aos seus usuarios». Pese a ello, la Fundación Lar hace el esfuerzo de mantenerlo abierto. Espera que ese esfuerzo fructifique en la creación de un nuevo centro pero, si no es así, no podrá continuar mucho tiempo en funcionamiento.

La población que atiende Chavea comprende a menores sobre los que recae alguna medida de protección y que presentan problemas de adaptación social o enfermedad mental.

En el año 2006 se atendieron un total de catorce chicos. Hubo cuatro ingresos y cuatro altas, de las cuales tres fueron debidas al cese de la tutela y reintegro en el ámbito familiar, y otra por traslado de centro. La estancia media de los usuarios es de dos años, la media de edad de ingreso es de 15-16 años y la salida se produce a los 18, cuando cumplen la mayoría de edad. Dada la gran demanda de plazas, es difícil que se autorice una prórroga, de manera que a los 18 años se da de alta a los chicos aunque necesiten continuar en tratamiento.