Unos empresarios creen que no les repercutirá, otros que sí y la mayoría, que hay que esperar
30 nov 2016 . Actualizado a las 05:00 h.La próxima puesta en servicio de los 7,9 kilómetros del tramo Celeiro-San Cibrao de la Vía de Altas Prestacións (VAP) no pasa desapercibida para muchos negocios locales asentados en la travesía de Xove y en sus inmediaciones. Unos ven con recelo la apertura del vial, mientras que otros creen que no les afectará. Lo que está claro es que desde la Xunta estiman que la puesta en servicio de este nuevo tramo de la VAP permitirá retirar del centro de Xove unos 4.000 vehículos al día y unos 200.000 camiones al año. Actualmente, en recorrer los 8,3 kilómetros de la LU-862 entre el enlace de Beltrán-Xove (donde partirá el corredor) y la rotonda de Area (otro de los enlaces), un automovilista emplea una media de nueve minutos.
Aunque la mayoría de los empresarios consultados indican que habrá que esperar a la apertura para valorar el impacto, en algunos negocios ya manda el escepticismo. En empresas como Panadería Maral reconocen que, aunque tienen mucha clientela de Xove, también cuentan con una buena cartera de clientes que son de paso, turistas o vecinos de otras poblaciones. «Entre nuestros clientes hay trabajadores de Alcoa que, camino de Celeiro o Lodeiro, donde residen, paran aquí porque les coincide de paso y así evitan entrar al centro de Viveiro», reconocen en la panadería, que abren también a mediodía. «A la espera de lo que pueda pasar, yo de entrada le tengo respeto».
En Confecciones Fifa prefieren aguardar a que abra el vial antes de valorar el impacto. A pocos metros, en Peluquería Carlos, sí tienen claro que la apertura les puede afectar de forma negativa. Reconocen que, además del cliente de Xove, tienen mucha clientela de paso. No obstante, no pasan por alto que el nuevo tramo viario, de 7,9 kilómetros, es un tramo corto y que no representa grandes avances en la circulación por la carretera de la costa, ya que los conductores que dejan el corredor en Area deben afrontar el colapso de tráfico en Viveiro. «Si hai sorte, non vai pillar ninguén o tramo novo».
El propietario de la estación de servicio de Repsol cree que su negocio puede ser uno de los más afectados. Confiesa que él se ocupa de cuidar a la clientela fija de siempre. Otra situación diferente se presentará en verano, cuando el tráfico se incrementa de forma considerable: «Nese caso, confío en que a clientela de sempre que xa coñece os nosos servizos siga entrando dirección Xove e pasando pola estación». Al igual que otros empresarios, señala que al ser un tramo tan corto y al no garantizarle al conductor la posibilidad de evitar el «embudo» de Viveiro, muchos conductores no entrarán al corredor. Por otra parte, confía en que, al reducirse el volumen de tráfico por el centro de Xove, le autoricen a cambiar la señalización horizontal y los conductores que circulan por la LU-862 en dirección a Burela puedan acceder directamente a la estación de servicio, a diferencia de lo que ocurre actualmente.
En la pescadería Barreira creen que no les afectará la apertura. «A xente que queira parar vai seguir parando», indica el dueño que reconoce que, a diferencia de otro tipo de negocios, ellos tienen mucha clientela de Xove. «Tamén temos clientes de Celeiro e Area que cando van ao hospital aproveitan para comprar».
Quien cree que la apertura del tramo Celeiro-San Cibrao no influirá negativamente en las empresas locales es el alcalde, Demetrio Salgueiro. Reconoció ayer el importante compromiso de la Xunta al ejecutar obra obra de 50 millones en una situación económica difícil. Cree que Xove saldrá beneficiado al librarse del tráfico pesado del centro: “O ideal sería que este tramo tivera continuidade coa variante de Viveiro”.”Teño claro que a xente non vai deixar de ir ao comercio e ás empresas de Xove porque se poña en marcha o tramo do corredor”, sentenció.