El marquesado de la Ría de Ribadeo pervivirá tras fallecer Calvo-Sotelo

J. A. Quelle

A MARIÑA

28 may 2008 . Actualizado a las 02:00 h.

ribadeo | Cuentan que cuando el Rey Juan Carlos I le propuso al ex presidente del Gobierno, Leopoldo Calvo-Sotelo, darle el título de marqués y le preguntó con qué nombre, el que fue en vida alcalde de honor de Ribadeo no lo dudó y contestó: Marqués de la Ría de Ribadeo. El resto es historia: el 24 de junio de 2002 el Rey firmaba el Real Decreto por el que se creaba y concedía el título de Marqués de la Ría de Ribadeo, con Grandeza de España, a Leopoldo Calvo-Sotelo y Bustelo.

Con la muerte del que fuese hijo adoptivo de Ribadeo, el marquesado pervivirá. Así lo establece el Real Decreto.

«En atención a los méritos contraídos por don Leopoldo Calvo-Sotelo y Bustelo, en una larga trayectoria política al servicio de España y de la Corona, de cuyo Gobierno ejerció la Presidencia con prudencia y alto sentido de la responsabilidad, y como muestra de Mi Real aprecio», señala Juan Carlos I en el Real Decreto del 24 de junio de 2002, y concluye: «Vengo en otorgarle el título de Marqués de la Ría de Ribadeo, con Grandeza de España, para sí y sus sucesores, de acuerdo con la legislación nobiliaria española».

Marqués es un título con el que los monarcas muestran su aprecio y gratitud a determinadas personas o linajes. Según la legislación nobiliaria, la esposa del titular recibe el título de marquesa, que en la actualidad recae en Pilar Ibáñez. A su muerte lo heredará el primogénito de la familia y su cónyuge.

En la actualidad, en España se contabilizan casi 1400 títulos nobiliarios. De ellos, 140 son además Grande de España, que es el reconocimiento nobiliario europeo más alto. Es el caso del Marqués de la Ría de Ribadeo. En el caso de que concurran los dos, el tratamiento es es de Ilustrísimo, pero si se trata exclusivamente de Marques, es de Excelencia.

En el caso de ser Grande de España, el orden de importancia de los títulos es de Duque, Marqués, Conde, Vizconde, Barón, Señor y Grandeza personal. Sin Grandeza, el orden es: Marqués, Conde, Vizconde, Barón y Señor.