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Sánchez Aguilera. Techos vegetales. El antiguo acuartelamiento ofrece un repertorio de auténticos jardines sobre tejados y canalones de edificios y elementos como esta garita, además de las cubiertas rotas en los pabellones.CÉSAR TOIMIL
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Canido. Un buhardilla a punto de ser tragada. La estampa asusta con solo mirarla. Pocos son los transeúntes de la calle Alegre que no reparan en el precario de estado de esta vivienda en ruinas en la que el deterioro de su cubierta es tal que está a punto de tragarse la buhardilla, en una zona muy frecuentada por su proximidad a un centro escolar. Las viviendas en ruinas dejan estampas desoladoras también desde arriba especialmente en los barrios históricosJosé Pardo
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A Magdalena. Unas visitantes indeseadas. Puntuales cada año las gaviotas encuentran en los tejados del centro de Ferrol el mejor lugar donde tener a sus polluelos. Sus nidos y suciedad deterioran las cubiertas. José Pardo
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Calle Lugo. Antenas caídas y uralitas. Esta estampa es habitual en muchas zonas de Ferrol: cables y antenas descolgadas y sujetadas de forma precaria sobre tejados de uralita donde duerme el amianto.CÉSAR TOIMIL
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Ferrol Vello. Un pinar sobre la casa de Carballo Calero. Los vecinos aseguran que una estampa como esta solo se puede ver en una ciudad como Ferrol: árboles sobre los tejados. En concreto, sobre la casa donde vivió el ilustre profesor y lingüista Carballo Calero, coronada en un lateral por una frondosa capa de vegetación y en un nivel superior un par de sorpresivos pinos. CÉSAR TOIMIL